juego limpio

El fútbol esta en la razón de existir de nuestro equipo, por eso en función de mantener la pureza del juego nos hemos puesto como primer valor el fomentar el juego limpio. En nuestro equipo no existen los atajos ni las trampas, mantendremos siempre respeto entre nosotros y los rivales, siempre dando el 100% de nuestras capacidades para lograr la victoria tanto en la cancha como fuera de ella para ser un ejemplo de deportividad para las siguientes generaciones.

respeto

El Club de Futbol Atlante exigirá un comportamiento respetuoso para todos sus jugadores, a todos los que hacen vida dentro y fuera del club. Entendiendo que nuestros derechos terminan hasta donde comienzan los del vecino. En ningún momento el club discriminara a ninguna persona por credo, origen, religión, raza, genero y/o cualquier rasgo que nos haga distintos unos de otros, creemos que en la diversidad esta la fortaleza de nuestro equipo.

HUMILDAD

Nuestra gran historia nos ha enseñado que el fútbol va más allá de un balón rodando por el césped, el futbol es un estilo de vida, se siente, se respira y se lleva en la sangre. El fútbol tiene altos y bajos, pero nunca debemos perder nuestra humildad, nuestro equipo nace del pueblo y se mantiene en el pueblo, ser un potro de hierro no es simplemente entrar en la cancha y jugar, ser un potro de hierro significa ser humanos, ser humildes, es ser un representante de un sentimiento de lucha, por llevar este escudo mano a mano con la afición.

GARRA

Ser Atlante, es ser de hierro es ser del pueblo. Ser Atlante es luchar contra la adversidad, es caerse y levantarse para seguir corriendo. No importa qué tan difícil pueda parecer nuestro objetivo juntos como equipo tenemos la mejor oportunidad de alcanzarlo. Es sufrir las derrotas, es disfrutar las victorias es vivir cada minuto del partido, nuestro equipo siempre va al ataque aquí no jugamos para mantener un empate.

MÍSTICA

El llevar nuestros colores tiene un peso de más de 100 años de historia, de miles de jugadores que han sudado la camiseta, de héroes que han caído y mucho más importante se han levantado para seguir luchando. Nuestro equipo exige excelencia y humildad, nuestro equipo es de hierro y camina junto al pueblo. Llevar el escudo Atlante en el pecho es un honor que hay que representar con respeto y lucha, con esa mística que nos define y que hace entender al rival que si no da el 100% contra nosotros, es mejor que no entre a la cancha.